Cuántas veces hemos visto los tamarindos en flor custodiando las playas de La Concha y Ondarreta.
INSTANTANEA
Gabriel Celaya
(Alderdi-Eder, 19 febrero, 4 tarde)
TAMARINDOs desnudos perfilados
contra el puro posible de la niebla.
Callando, se oye el mar que rompe lento
en las playas remotas de otros mundos.
Suspenso, el corazón guarda un secreto,
vive allí donde ya no es solo mío.
¡La pura posesión, la nada pura
en lo alto de un latido que no vuelve!
Y después de La Concha, encaminados hacia la Parte Vieja, los balcones decorados con buganvillas, "Los balcones de María"
Plaza Sarriegui
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