Se trata de órganos subterráneos que las plantas utilizan como reserva de nutrientes.
Los bulbos son la base de las hojas de las plantas bulbosas, y tienen la capacidad de aumentar de grosor.
Estas plantas suelen ser originarias de zonas donde el clima fluctúa mucho a lo largo del año. Al almacenar reservas en el bulbo pueden perder las hojas durante el invierno y brotar de nuevo en primavera, cuando las condiciones sean adecuadas para que la planta se desarrolle de nuevo.
Por tanto, los bulbos tienen también una función reproductiva, ya que permiten a la planta propagarse a lo largo del tiempo.
Maravillosos colores primaverales